Los vigilantes de la playa.

Después de poco pensar, que ya os tengo dicho que es malo para la salud, tanto física como psíquica (yo es que lo somatizo todo y cuando tengo un mal rollo en la cabeza me sale un herpes en la nariz, un grano y en el peor de los casos vomito, claro que hay tantas cosas vomitivas, pero ya me estoy poniendo tóxica y no me lo puedo permitir) he decidido dejar de autocompadecerme, que me chifla y es muy yo, tengo tendencia, y tomarme las cosas de forma más liviana y frivolona.
Estas vacaciones están siendo un poco fuera de lo normal, de lo que estamos acostumbrados, pero es que tenemos que habituarnos ya a esto, las niñas crecen y, me temo, que esto no va a mejorar ni empeorar, va a cambiar y punto, cuanto antes lo asuma, pues antes me dejan de extrañar los nuevos comportamientos. 
A ver, que si la niña va con el bañador metido por el culo como un tirachinas, pues mira su perineo que lo sufra, si yo lo hiciera me operaría de hemorroides sin anestesia.
La otra... es una inconsciente total, y se va con la amiga a ver los fuegos artificiales que salen de los ojazos azules del chico del tercero A, se pone a hacerse fotos en plan morritos, enseñando hombros, "canalillo"..., pero sale detrás el pibón, bombón, que encima es buen estudiante, según su abuela, que por otra parte nos enteramos que,estudiante lo es de "anatomía" aunque tenga 15 años, le da a la cachimba y a otros vicios adultos, pues porque le miren las dos amigas y se hagan fotitos, todavía, no pasa nada, cuando la cosa vaya a mayores, entonces ya hablamos.
Si el que duerme a mi lado queda prendado de las tetas que luce la de la sombrilla de abajo, pues es que todo desde arriba se magnifica. Si las quiere iguales que se aguante y con mirar..., pero furtivamente, que descaradamente es de salidos.  Yo me doy el gustazo de ir arriba y abajo, con el cubito de la niña, buscando a los socorristas de la playa... ¡Madre mía, madre mía! Cuando los veo!!! Este ayuntamiento, definitivamente, hace una labor social, uno ronda los 60 y tantos con todas sus redondeces (que si no las tuviese sería un senior atractivo y con cuerpazo) el otro, no lo puedo describir sin herir sentimientos... Pero me da a mí que estos las vidas las salvan así:_ Vengaaaa!!! Ánimooo! Zi usté no pué másssjj buseée, que ´tá ya cazi en la orillaaaa!
_ Quillo! Es que el agua ´tá que corta... zerá cabrón! A quién ze le ocurre ponerze a nadá como zi fueran las olimpiás... Engaaaa! Que ya queda poquitoooo!!!
_ Pos un pasmao... ze lo buscan zolitos, zi guardaran la digestión las 4 horas, esto no pazaba. Verá tú que nos tenemo que meté, esto va a cara o crú, ein?
_ Qué dise tú! Ande vaaaa! Yo no meto un deo ahí no zea que me lo tengan que amputá, amo a llamá a la sentralita...
_ Pos yo creo que es lo mejó.  
Oye que yo no quiero quitar mérito, que por lo menos avisan, si fuera yo y me pidieran auxilio, seguro que me creería que me están saludando, y me pongo como loca a mover los brazos, que me he venido muy arriba y estoy que desbordo. Además han sembrado la esperanza en la vida laboral de los maduritos, ya no nos cogen en el burger ni el Telepizza, pero de vigilantes de la playa estamos perfectos
Así, cuerpazos, cuerpazos, los hombres por aquí... Los que los tienen... o llevan turbopakets, y "la cola de sirenito", se vislumbra de manera obvia, un tanto repulsiva, pero para gustos colores, o están en Malibú beach haciendo series de abdominales brillando con el sudor pero huelen a fresa no a macho del monte. Lo que yo os diga, que esto es muy familiar y se dan a la cervecita para olvidar que tienen hijos y una petarder en la silla de al lado. Pero cada uno tiene lo que tiene, mientras tengamos salud y nos podamos reir de nosotros mismos. Pa nosotros la vida!!
Bajo y después...
Subo con el cubito, cual madre abnegada.


El de la izquierda, conduce muy rápido la lancha por eso no tiene pelo. El opuesto, sin embargo, es el que se sumerge, y todo el mundo sabe que el pelo con el agua crece... En sus abdominales hacía yo mi colada, OMG! (Oh My God!)




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