Resulta que naces, y ni te tienes en pie, ni sabes comer solo, no sé si seremos el único animal sobre la faz de la Tierra que le pase, pero parece ser que sí.
Vas creciendo como los monos, pero en versión menos peluda (a eso de los pelos llegaremos más tarde), pero la comunicación es de homínido total, tu madre te entiende, pero porque es tu madre y ya está, el resto ni te entiende ni quiere, a no ser que berrees como un venao, ahí hay que tomar medidas por la salud mental, básicamente, un bebé puede volverte loca de atar.
Cuando Junior nació era tal el llanto, que se me erizaban los pelos de la cabeza y me convertí en una especie de Espinete, el erizo rosa de Barrio Sésamo, con eso de la anemia postparto, estaba con un careto de no te menees y me pasaba con el colorete, bueno eso decía mi hermana, que es muy sabia. Menos mal que me pilló el invierno y me puse gorro, que no me quité hasta el 22 de mayo, que cayó el último diluvio. Pensaréis que tengo buena memoria. Para nada. Es que se casaron los ahora reinantes... Sa cara de panolis... Puaggg... Qué ascazo!
Unos años después que tú ya te crees la popular, tus amigas son lo más, y lo que digan va a misa, porque tu madre está desfasadísima, siendo la pequeña de 5, aunque tuviera muchas puertas y ventanas abiertas, era de un planeta distinto al de mis hermanos... Mi hermana vivía en el suyo propio, hacía lo que le salía de los webs, y tenía mucho mérito, porque con tanta prohibición parental, luego ha salido de lo más normal y la más cuerda.
Pues eso, justo ahí, llega la época de los granos, eres el SEMPA nacional (almacén de grano y trigo) los pelillos del sobaquete, que tu madre te dice que eso no es ná, claro nada comparado con los de mis hermanos, que ya se podían haber hecho una sesión de corte y cardado, por favor, qué asquete. Cuando veo a esos prepúberes con los mochos ahí cada vez que levantan el brazo... quiero morir, y ellos tan normal. Mi lucha siempre ha sido mi entrecejo, perdón, unicejo... Es horrible a día de hoy, pero sigo descubriendo que hay cosas peores que los granos pajeros, los pelos faciales y no faciales. Las hormonas, son unas hijas de puta como una catedral. Ellas tienen la curpita de tó... Si te pones tontorrona, las hormonas, si tienes la risa floja, las hormonas, que no te salen las tetas (eso puede ser hereditario) si estás gorda, también aunque te trinques un buey relleno de pájaros.

El otro día iba con mi amiga Lucía y entramos en una tienda, casualidades, nos encontramos con una compañera (omito nombre) nos saludamos con efusividad, que años mil que no nos veíamos, y empieza a decirnos que estamos estupendas, que ni arrugas ni nada, vaya tipos, y va la tía y me dice _ Bueno, aunque a tí se te nota que tuviste acné...
Nos miramos las dos y nos echamos a reir, será japuta! Con lo estupendas que estamos de puertas para fuera! En fin que se le debió torcer el colmillo. Ella era supermona, superbuentipo, supertodo, pero nos dijo que tenía tiroides... Yo también! A ver si nos enteramos! Qué para eso has estudiado! _¿Hipotiroidismo? joder que putada, eso te pone como una vaca... Le dijo mi amiga, que tacto 0, como se puede leer.
Casi se pone a llorar, la pobre (hijaputa) dice que un descontrol total de hormonas (otra vez...están aquí)
Llevar gafas ha marcado 24 años de mi vida, nunca me importó, excepto cuando íbamos a la piscina, me perdía todo el meollo de la cuestión. Lo de no ver un pimiento fue el preludio de una gran imaginación y, de una posterior operación de miopía que me ha dado la vida veraniega, hasta ahora. Empezamos con la presbicia. Cuando ya me había acostumbrado a mi cara, oootraaa vez a llevarlas. Bueno, lo que me consuela es que ya son bastante más monas, pero como con casi todo, voy a ser dependiente total, no veo un guindo a un metro. También hay una degeneración congénita de retina, y cada equis, me dan con láser para pegármela.
Luego lo que yo veo es que hay mucha desinformación cuando empiezas con la PV. Un día te levantas, y te quedas más tiesa que un ajo, vas al médico y te manda al fisio porque es una contractura tensional, me preguntó que si había hecho algún movimiento que me hiciera daño, a ver que yo me muevo mucho, y me hago daño, claro, pero hasta ahora, dolores de cabeza, dolor de estómago, benditas diarreas (me ahorro el Micralax) y ya está, dando gracias.

Ya no voy a hablar de las reglas que van y vienen cuando les da la gana, ni de la sequedad vaginal, porque eso tiene solución, como todo.
Mi madre siempre ha sido muy de tomar levadura de cerveza, el aceite de onagra, el propóleo, las mascarillas naturales, que se le iban cayendo por casa (yogur con zanahoria y miel) nosotros ahí detrás recogiendo el mejunge... Pero nada, le he salido rana, que si me tengo que tomar todo eso antes del desayuno, me voy a trabajar sin comer, a base de productos, y voy a durar toda la vida...
Pues eso, después de lo que os he contado decidme si no es para plantearse que la naturaleza No es sabia. Cuando te jubilas y mejor te sientes, es que te han dado tiempo para empezar con el periplo de médicos que no has tenido tiempo de consultar.
Pa las chochis como yo la vida, con canas y sin ellas, las arrugas no cuentan que son de expresión. Sed felices.
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